Las recientes revoluciones tecnológicas ligadas al fenómeno del «Big Data«, la robotización, la realidad virtual, la inteligencia artificial (IA) multiplicarán nuestras capacidades de observación y nos permitirán cuantificar fenómenos biofísicos o sociales más allá de nuestros 5 sentidos en múltiples escalas espaciales y temporales.
El desafío tiene como objetivo brindar las respuestas para comprender de manera efectiva y explotar “inteligentemente” los flujos masivos de datos que enfrentarán nuestros clientes.
I-SEE airborne observatory se compromete a desarrollar un marco estratégico real para implementar esfuerzos de I+D en el campo de la IA para resolver problemas complejos y realizar tareas que normalmente realizan los humanos. La disponibilidad de grandes cantidades de datos, combinada con métodos basados en el aprendizaje automático, hacen posible impartir conocimiento a las máquinas.
Esta comprensión de la información por parte de una IA permite aumentar de manera efectiva la explotación de la información al limitar tanto los recursos informáticos empleados como al reducir considerablemente el tiempo de procesamiento. Por ejemplo, se puede aplicar al análisis de imágenes aéreas o videos para detectar e identificar automáticamente objetos.
Junto con Deep Learning, nuestras soluciones permitirán desarrollar soluciones predictivas mediante el análisis de experiencias pasadas para actuar de manera más efectiva.
Este enfoque promete ganancias sustanciales de productividad al tiempo que limita el riesgo de error. De hecho, la máquina tiene como objetivo aliviar al operador humano para que pueda concentrarse más en su trabajo de análisis mediante la realización de tareas complejas y repetitivas.
La observación aérea unida a la IA cambiará considerablemente nuestra forma de entender los complejos problemas a gestionar y nos permitirá jugar un papel protagónico frente a las cuestiones climáticas.